miércoles, 27 de marzo de 2013

Mas de la victoria de Tommy Haas

APEl festejo del alemán tras vencer al número uno del mundo
MIAMI Renacido. En 2002, Tommy Haas vivía sus mejores momentos en el tenis y alcanzaba el número dos del mundo. Pero a partir de ahí, las lesiones le hicieron pasar más sinsabores que alegrías. En 2010 tocó el piso y terminó el año fuera de los 300 mejores.
Pero resurgió. En Miami venció a Novak Djokovic por lo que el serbio quedó afuera de los cuartos de final de un torneo por segunda vez desde el Masters 1000 de París en ese mismo 2010. "Me siento muy feliz y orgulloso de lo hecho esta noche (el martes) contra un gran jugador que ha estado dominando el deporte los últimos años", confirmó minutos después de terminar el partido.

Para el alemán, la victoria fue más que eso: esta fue la primera vez desde 1999 que vence a un número uno del mundo. Pasaron más de 13 años. Por eso, se disfruta mucho más: "Estos son los momentos que más aprecio, jugar en estos grandes estadios, contra los mejores del mundo. Jugar contra alguien como Novak y llegar a la cima en este momento de mi carrera es increíble", afirmó en conferencia de prensa, luego de dejar al máximo favorito.
¿Qué cambió en menos de 15 días, luego de caer sin atenuantes con Juan Martín Del Potro? "Tuve la mentalidad en creer que podía ganar. En Indian Wells, contra Del Potro, tuve demasiados problemas y no tuve plan B. Estaba frustrado con mi juego. Esta vez, cuando me desperté a la mañana sentí que estaba fresco, miré el pronóstico del tiempo y vi que iba estar muy frío y ventoso esta noche. Yo no estaba contento. Es inusual este tiempo en Miami. Y se supone que estará más frío mañana (este miércoles enfrenta a Gilles Simon). No es muy bueno para mí, a mi cuerpo le gusta mantener el calor. Hay que ajustar la tensión de la raqueta y prepararse mentalmente para ello".
Pero el alemán también acumuló confianza mirando para atrás. En 2009 lo había vencido dos veces al serbio pero, además, la temporada pasada cayó en Toronto en tres sets: "Traté de enfocarme. Habíamos tenido unas buenas batallas y había quedado contento por cómo había jugado y el simplemente jugó mejor al final. Esta vez las condiciones me favorecieron un poco, fue duro por los remolinos de viento. Tomé ventaja de las oportunidades, jugué muy bien. Me dio un montón de chances y las aproveché".
"Lo felicito. Usó una muy buena estrategia", dijo Djokovic. "Saco muy bien y se movió bastante bien por la cancha. Fue mejor.
"Siempre creí de que podía darlo vuelta. Estaba luchando. Lo intenté hasta la última pelota. Hay días en que uno no se siente bien en la cancha. Nada realmente resulta como quieres. Pero todo el mérito es para él por hacerme jugar así de mal".
Al ser uno de los jugadores preferidos en el ATP World Tour por muchos años, Djokovic sintió el apoyo de la gente para empujarlo a una remontada y demostró su decepción por no darle a la gente la posibilidad de ver un tercer set.
"Siempre me siento muy bien acá en Miami. La gente es fantástica y siempre me da mucho apoyo", dijo Djokovic. "Desafortunadamente no les pude dar ese tercer set, lo quería mucho. Intenté encontrar ritmo pero así son las cosas".
Djokovic ahora se concentrará para los cuartos de final de Copa Davis, donde Serbia visitará a Estados Unidos en Boise, Idaho.

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